Por: Paulina Carmona
1. Frankenstein
Fue durante una época de confinamiento lo que llevó a Mary Shelley a escribir su más grande obra literaria, consecuencia de una apuesta que surgió entre ella y las demás personas con las que tuvo que encerrarse una temporada debido al mal estado del tiempo.
Con tan solo 19 años, Shelley logró plasmar no sólo los terrores existenciales que persiguen al hombre desde tiempos remotos, sino que logró ahondar en las preguntas más fundamentales sobre la diferencia entre hombre y monstruo, logrando que el lector cuestione su propia existencia y moral, así como la misma existencia y concepción de un dios.
2. Jane Eyre
Charlotte Bronte inicialmente había publicado su obra de manera anónima, y se le atribuía tal creación a un escritor llamado William Makepeace Thackeray, el cual defendió siempre que la obra era de ella y no suya. Charlotte es considerada una de las mejores escritoras de novelas románticas de todos los tiempos, siendo esta obra la que más destacó.
Jane Eyre salió a la luz en una época en la que la literatura tenía los roles de género muy marcados, enalteciendo el rol de ama de casa de las mujeres, considerándose sólo así como perfectas. Esta corriente ideológica de la Inglaterra victoriana, se conoce como “the angel in the home”, en donde las mujeres debían ser sumisas y serviciales con sus esposos, así como recatadas, sofisticadas, adorables y siempre bien presentables.
Esta novela vino a revolucionar la forma en la que se le tenía que ver a las mujeres, ya que Jane Eyre se muestra tal como es, rebelde y tratando de romper con esa figura perfecta que se esperaba de las mujeres.
3. El insólito mundo y otros seres imaginarios
Este compendio de cuentos escritos por la escritora mexicana Yolanda Rubioceja, nos permite echar a volar la imaginación con relatos cortos sobre cosas que a simple vista no tienen magia, pero una vez puestas en palabras de Yolanda, nos permite encontrarle lo increíble a situaciones y objetos de uso diario.
Yolanda nació en 1972 en la Ciudad de México, estudió Diseño Industrial en la UI y en el 2012 publicó este libro. La lectura es muy ligera, entretenida y llena de relatos que verdaderamente permiten al lector transportarse a otra realidad llena de seres imaginarios.
No hay muchas mujeres que escriben cuentos y sin duda hay que seguir apoyando el crecimiento de éstas en la literatura hispanoamericana.
Existen mucho más libros escritos por otras mujeres igualmente asombrosas, estas son algunas recomendaciones que te hacemos pero cuéntanos si tienes alguna autora favorita o un libro especial para ti, que haya sido escrito por la mente brillante de alguna mujer.